Final Renacido (II)








¡Y es Ella, sí,
sé que es Ella!

Ríes tú,
y es suya tu sonrisa.
Caminas a mi lado, hablándome,
y brotan, confusas, las palabras
de sus labios.
Me besas con inocencia,
y hago suyo tu beso.
Abrazo tu cuerpo,
pero se que no es a ti
a quien abrazo.

Porque
Ella,
será siempre Ella.
Nunca tú.