Este microrrelato participó en Las Palabras Encriptadas de Calados hasta los versos.
¡Zapatero encarcelado! ¡Zapatero encarcelado!
Ante la mirada atónita de los contados viandantes, que aún no terminaban de salir de su asombro, el muchacho que repartía la gaceta matutina vociferaba a los cuatro vientos la increíble noticia. Como si en aquel acto, que repetía reiteradamente cada amanecer, se jugase una vez más la vida. O su pan diario, en realidad. Las perezosas callejas de la ciudad comenzaron a bostezar sus puertas y postigos, curiosas ante la inverosímil noticia con la que despertaban al nuevo día. ¿Encarcelado? Debía tratarse de alguna cruel broma; o en todo caso de una lamentable confusión. Aquel buen hombre, al que todos conocían y apreciaban, no podía ser el mismo al que referían en aquel titular de prensa...
¡Zapatero encarcelado! ¡Zapatero encarcelado! El mismo Rey en persona fue quien lo mandó arrestar!
La noticia corrió como la pólvora: la codicia se encargó de cercenar de cuajo la impoluta reputación que hasta entonces se había ganado a pulso aquel hombre.
En la trastienda de la zapatería, los soldados del Rey habían descubierto una habitación semitapiada donde aquel canalla mantenía retenidos a más de veinte duendecillos, a los que hacía trabajar en condiciones deplorables y sin remuneración.
Los hermanos Jacob y Wilhelm Grimm, sumamente contrariados, decidieron reescribir el final de su historia. Lamentablemente, fue la original la que llegó hasta nuestros días.
Ante la mirada atónita de los contados viandantes, que aún no terminaban de salir de su asombro, el muchacho que repartía la gaceta matutina vociferaba a los cuatro vientos la increíble noticia. Como si en aquel acto, que repetía reiteradamente cada amanecer, se jugase una vez más la vida. O su pan diario, en realidad. Las perezosas callejas de la ciudad comenzaron a bostezar sus puertas y postigos, curiosas ante la inverosímil noticia con la que despertaban al nuevo día. ¿Encarcelado? Debía tratarse de alguna cruel broma; o en todo caso de una lamentable confusión. Aquel buen hombre, al que todos conocían y apreciaban, no podía ser el mismo al que referían en aquel titular de prensa...
¡Zapatero encarcelado! ¡Zapatero encarcelado! El mismo Rey en persona fue quien lo mandó arrestar!
La noticia corrió como la pólvora: la codicia se encargó de cercenar de cuajo la impoluta reputación que hasta entonces se había ganado a pulso aquel hombre.
En la trastienda de la zapatería, los soldados del Rey habían descubierto una habitación semitapiada donde aquel canalla mantenía retenidos a más de veinte duendecillos, a los que hacía trabajar en condiciones deplorables y sin remuneración.
Los hermanos Jacob y Wilhelm Grimm, sumamente contrariados, decidieron reescribir el final de su historia. Lamentablemente, fue la original la que llegó hasta nuestros días.
93 comentarios:
Ya me parecía a mi muy raro que nos cayera esa breva.
Muy bueno.
John W.
Hola Onmi!! Me encantó. Esos duendecillos no merecían trabajar en esas condiciones. Menos mal que los hermanos Grimm cambiaron el final.
besosssssss
Interesante vuelco de la historia el que le haz dado
un Abrazo!
¡Genial! ¡Fabuloso! Me encantó.
Saludos cordiales Omni,
Hasta pronto un gran abrazo.
jajajaj muy bueno!...y yo entré convencida que tenía una connotación política! ajajaja.
¡Otra vuelta de tuerca!
Saludos
Hola Onminayas muy bien llevada la historia hasta el final. Juego de palabras que te llevan a jugar con las ideas. La mente autónoma se va hasta los cerros de Úbeda para aterrizar a la realidad. Bien por los duendecillos.
Un beso
Hola, Polidori.
Torres más altas han terminado cayendo...
Un abrazo.
Hola, Gabi.
Nadie merece trabajar así. Por desgracia este tipo de esclavitud sigue vigente en nuestros días.
Besos.
Hola, Leo.
Me alegra que te gustase.
Un abrazo.
Hola, Pluma.
¿Te quedó algo por decirme? Gracias.
Besos.
Hola, Neo.
¿Connotación política? ¿Dónde? Cuándo? ¿Cómo?
Besos.
Hola, Xibeliuss.
Hasta que algún día se pase de rosca...
Un saludo.
Hola, Katy.
No lo había pensado, pero ahora que lo dices es verdad que el texto puede prestarse a una doble interpretación, jajajaja... Nada más lejos de mi intención.
Besos.
Eres un artista amigo Onminayas.
Has relatado un cuento increíble, por un momento pensé que el mismísimo Zetapé había sido encarcelado por inepto y mangoneador...o...¿así fue en realidad? jajaja...
¡Ay, si los hermanos Grimm lo hubiesen conocido! sin duda hubieran escrito otro cuento.
Besos guapetón.
Al final como siempre, ¡sorpresa! jejeje. Me encantan los giros que das a las historias. Enganchan desde el principio.
Un abrazo enorme
Ya se sabe, niño. Quien construye castillos de arena.........O viene una ola y se lo lleva, o se olvida la protección y la gorra y se quema o llega otro gandul con una pala más grande y se lo lleva por delante...
A saber.
Pd: A ver si este comentario te sale, porque el anterior te lo contesté pero no llegó nunca a leerse...ummmm...;P
Besines.
Onminayas! Increible como todo lo que escribis!
Estos microrelatos me encantan, ademas de sorprenderme cada vez!
Me fascina ese suspenso hasta el final que mantienes.
Ahora tambien venia a mi mente, cuantos zapateros o diseñadores tienen escondidos a su "grupo" de duendecillos?
Magnifico relato que se adapta perfectamente a la realidad de nuestros dias.
Un beso o 2!
Onminayas...
Viendo el título me dije ayyyy, jaja, pero tras leerlo me di cuenta de que los tiros iban por otro lado. La verdad es que es deplorable el trato que reciben algunas personas, nuestros semejantes, asi es la raza humana.
Un fuerte abrazo.
Voy para el YdB a votarte¡¡
ajajaja, muy bueno! Aunque los duendecillos esos ahora son negritos y fabrican balones nike...
:S
Un besote.
-Nos cargamos todos los cuentos.
Gracias por tu participación Onminayas, ha sido un gran relato y un placer contar contigo como siempre! ;P
Besos gigantes.
Arwen
No sé si merece la cárcel.
Igual si.
Pero lo que seguro merece es aprender a decir la verdad.
Saludos.
Hola, Elena.
Si hoy en día vivieran los Hermanos Grimm, seguramente gozaríamos de una producción muy, pero que muy prolífica.
Besos.
Hola, LaMar.
Me alegro de que aún pueda sorprenderos.
Besos.
Hola Mari Carmen, y bienvenida a este rincón.
Me gusta descontar cuentos... Por ahí tengo algún otro también destripado.
Besos. Estás en tu casa.
Hola, Loose.
Este al menos entró. Y el otro, seguramente los duendes sabran dónde lo han puesto, jajajaja...
Besos.
Hola, Eleanor.
Gracias. Siempre eres muy generosa con tus comentarios.
Besos.
jajajaaja, ya me parecía a mi...
vaya juego...
muy bueno, mira con el zapatero remendón...
Un beso
Hola, Felix.
Así somos, sí... Y así nos seguirá yendo.
Un abrazo.
Hola, Como te lo digo.
Muy aguda tu puntualización... Y no menos certera.
Besos.
Hola, Arwen.
Una pena que se suspendan por ahora los criptex. Era lo único que conseguía hacerme olvidar que la noche del domingo es en realidad la maldita antesala de los lunes.
Besos.
Hola, Toro.
Tienes razón: todos podemos equivocarnos. Pero la mentira no logra humanizar más aquel acto.
Un saludo.
Hola, Arantza.
Al menos que la crisis no nos despoje del sentido del humor...
Besos.
Pobres, los duendecillos... menos mal que los Hnos.Grimm cambiaron el final!
Un abrazo
Lo triste es que hoy día hay muchos "duendecillos" que siguen trabajando en régimen de semiesclavitud para muchas de esas "marcas" de renombre y tremendamente caras. Deberían de correr la misma suerte que el zapatero de tu relato, que quieres que te diga.
Un saludo.
No sólo la historia, como siempre sorprendente. Cada palabra ejerce su peso específico con la delicadeza de un cincel bien afilado. Y la infinita magia que sólo los duendes saben enseñarnos.
Te aplaudo.
Y una sonrisa
excelente e inesperada vuelta de tuerca... me encantan esas cosas
buenisimooo
beso
Pero caray!
A esos duendecillos hay que ponerlos a trabajar y si es en lo que mas les gusta bue...que se ganen la comida y no chillen tanto jajaja
Estupendo tu relato
Un abrazo fuerte y este también es tuyo? jajaj es broma!
Me ha encantado !!! jajajajaja
¡¡Un aplauso!!
Maravillosa imaginación en un bello relato.
Un cariño.
mariarosa
Al ver el titulo, he leído deprisa el texto, por si había ocurrido algo y no me había enterado. Pero no, al final asomo la sonrisa a mis labios, aunque a los pobres duendecillos no les haría ninguna gracia. Le has sacado mucho "juguillo" a este cuento. Un abrazo.
Carambas se sindicalizaron los duendes !!! Pues que se prepare la Blancanieves seguro que los enanos la demandan!!
Genial me encantó
Besos
Noe
Hola Onmi:)
GEnial, muy bien llevado ya que el interés no decae.
Ya me suponía yo algo... muy buen final y hay muchos zapateros por ahi que explotan impunemente a muchos duendecillos.
Invita a reflexionar, hoy en día como bien comentaba alguien Los hermanos Grimm no se como hubieran terminado este relato.
Un beso y enhorabuena
Bueno no te preocupes Onminayas, sólo es algo temporal...así nos quedamos con la miel en los labios y por supuesto que estáis todos invitados a enviarnos nuevas obras para la 2ª edición que ya os avisaremos cuando volverá...y se me olvidó comentarte lo bien que lo pasé moderando este criptex sobre todo al principio cuando la gente tenía muy claro de que "Zapatero" se trataba...ja,ja,ja...muy bueno Onminayas!! ;)
Besos.
Yo pensando que hablabas de política y me encuentro con esta denuncia, que permite que te diga, me ha resultado deciliosamente divertida. ¡Bravo!
Desde luego tus finales a veces son el comienzo de un divagar por la imaginación.
No, si va a ser que los duendecillos carecían de poderes y los zapateros no...jajajaja
Desde luego , los explotados de ahora somos simples mortales...
Por eso algunos no solo trabajan gratis si no que un poco más y ponen dinero...jajajajaja
(Me rio por no llorar)
Fantástico leerte¡¡
Besos
Besos
Original relato.
Ya me extrañaba que fuera nuestro ZP el encarcelado.
Antes tendrían que ir otros muchos.
Un saludo
¡¿Cómo puedes ser tan genial?! Gracias por dejarme siempre con una sonrisa boquiabierta. Que no sé cómo se hace, pero sí cómo se siente.
Un beso fuerte.
Llego tarde, está todo dicho.
Besosssssssssss
Onminayas......cuando mis ojos han leído el principio del relato, mi sonrisa llegaba de oreja a oreja.....luego cuando mis ojos han leído el final ¡Que disgustoooooo!
La historia muy bien, bueno requetebien jajajajjaa
Un beso
Como siempre, llego tarde...Pero llego, sabes que siempre llego...
Me ha encantado. Eres único, lo sabías?
Un beso de noche, estrellas, insomnio y chocolate con almendras...
No habíamos llegado a tiempo al criptex, pero te damos la enhorabuena por la transformación del cuento y el misterio que encerraba.
Un par de besos.
Me parece injusto... aunque desconozco a qué especie pertenecen los duendes... (todo hay que decirlo)
Muy bueno, amigo.
Muy bueno como siempre, si señor, jejeje
Un abrazo
Bueno Onmi, me paso a desearte muyyyyy buen fin de semana y si te apetece y puedes te acercas a leernos el Domingo que ya sabes que será nuestro último criptex...(por el momento claro)...
Besotes!!!!
Arwen
Como siempre, somprende ese giro de la historia.
Mi sentir es el de muchos por acá: los duendecillos existen y es muy triste la vida que llevan. Más de un Zapatero deberían encarcelar.
Un abrazo, genio!
Cómo vende el título del escrito! (risas)
De igual manera, nada está lejos de la realidad, digamos, salvo la cuestión de la detención, las condiciones laborales de millones de duendes humanos es parecida.
Lamentablemente.
Salutes!
Pasaba... que tengas buen domingo, aunque como dijiste sea la antesala del lunes, creo que para muchos...
Nadie mejor que tu para debatir mis palabras. Gracias. Por leer, y decir.
Que desilusión jajajajaja, muy bueno!!!
Espero ansiosa ese relato ;) el mio esta hecho por los protagonistas :( pero todo superado!!!
Feliz semana guapo!!!
Besitossssssss
Millones de duendecillos hoy, claman no por ese titular (quizás fuerte, aunque nunca se sabe) pero si por otros tipo ¡Zapatero, honradez! ¡Zapatero queremos trabajar! ¡Zapatero dimisión!. Yo, directamente lo he llevado al terreno político.
Disculpa mi atrevimiento ante mi primera visita a tu espacio desde el blog de Mar (In-ra)
Excelente final.
visita mi blog. mundochacal.blogspot.com
Hola, Eliane.
Así es: ¿cuantos duendecillos siguen así de explotados en nuestros días?
Besos.
Hola, Mar.
Y no sólo hay que mirar de puertas para afuera: con esto de la crisis ha terminado aprovechándose mucha gente en nuestro mismo país...
Besos.
Hola, Iliamehoy.
Gracias; siempre me regalas una palabra amable...
Besos.
Hola, Vir.
No sabes como me gusta verte por aquí o por allí.
Besos.
Jajajajaj... Sí, Vuelo, sí: también éste es mío.
Besos.
Hola Mariarosa, y sé bienvenida.
Gracias por tu presencia y tu comentario.
Besos.
Hola, Cordobesa.
Me gusta exprimir vuestras conciencias, jajajaja....
Besos.
Hola, Noe.
Si quieres saber el final de aquel cuento pásate por aquí: http://palabrasinsolentes.blogspot.com/2009/09/la-nina-con-vitiligo-adivina-quien.html
Besos.
Hola, María.
Tienes toda la razón: aún siguen existiendo muchos zapateros como éste, por todas partes.
Besos.
Hola, Arwen.
Aquella primera confusión era parte inequívoca del entuerto... Pero una broma que pronto supieron resolver, jajajaja...
Besos.
Hola, Sechat.
La política para los políticos... Mi intención era, cómo veo que así fue, divertiros.
Besos.
Hola, Leni.
Sigamos riendo entonces; que dicen que las penas con pan son menos.
Besos.
Hola Emilio, y bienvenido a este rincón.
Como ves todo fue una inocente broma...
Un abrazo.
Hola, Sunrise.
Gracias: aquella sonrisa fue mi mejor regalo.
Besos.
Hola, Nefertiti.
Tú nunca llegas tarde, jajajaj...
Besos.
Hola, Cuchu.
Me alegra que disfrutases finalmente con el cuento, jajajaj...
Besos.
Hola, Elena.
Si te llega de alguna manera este comentario, me gustaría que me dijeses por qué has decidido cerrar el blog. He intentado acceder a alguno de los dos que tenías, pero me ha sido imposible. Tampoco encontré en tu perfil ningún correo dónde escribirte. Siento que hayas tomado aquella decisión, aunque entiendo que habrás tenido tus buenos motivos. Sólo que me hubiese gustado que no nos desconectaras de todos aquellos hermosos textos, aunque hubieras descansado por un tiempo.
Muchos besos, Elena, allá dónde estés...
Hola, Gemelas, y bienvenidas a Las Palabras.
Gracias, gracias, gracias... Aunque ya habréis comprobado que para esto de los criptex no sirvo, jajajaj... Me los descubren todos enseguida.
Besos.
Hola, Buscador.
Eran unos duendes sindicalistas, estaba claro, jajajaj...
Un abrazo.
Hola, Descargar libros: ante todo sé bienvenido, y perdona que se me ha perdido tu comentario y te he dejado atrás. Gracias por tu visita.
Un saludo.
Hola, Magia.
Gracias por seguir ahí.
Besos.
Hola de nuevo, Arwen. En cuanto termine de responder todos los comentarios que tenía atrasados me paso por allí, que ahora mismo son ya las nueve de la noche.
Besos.
Hola, Fher.
Es cierto, amigo: siempre seguirán existiendo las injusticias.
Un abrazo.
Hola, Manu, y sé bienvenido a este rincón.
Es cierto que el título vende, jajajaj... Era parte del encanto y de la broma de este cuento, que por otra parte como bien apuntas es bastante real.
Un saludo.
Hola, Lady.
Es cierto... Para mí, al menos, no deja de ser a veces la propia antesala del lunes. Me gustaría que fuese de otra forma, pero es así.
Besos.
Hola, Oncepalabras.
Soy yo el que siempre os estará agradecido a vosotros por ser y por estar.
Un abrazo.
Hola Dama, y sé bienvenida a este rincón.
Es obvio que el título y el primer párrafo de la entrada se prestaban a otra interpretación: era parte de la broma del cuento.
Besos.
Hola, Mar.
Si puedo esta noche lo postearé... Si no, será pronto.
Besos.
Hola, Chacal y sé bienvenido.
En cuanto tenga ocasión pasaré a hacerte una visita, no lo dudes.
Un saludo.
Como siempre, despistando al lector.
Un día de estos, tus vueltas de tuerca se van a hacer realidad, y, entonces, tendremos que darte algún premio de verdad ...
Un beso
Magnífico.El placer que recibí al leer la primera línea solo podría haberse superado por Aznar encarcelado.Espero éste último nunca regrese como la mala hierba.Con lo del dedo exhibió su prepotencia,qué esperaba,¿Aplausos?
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