13 junio 2009
Testamento
Cabalga mi verso herido
a la grupa de la brisa,
y va a enredarse en tu risa
que me lo besa al oído:
Si se enciende tu temor
madrugará, siempre fiel,
sobre tu pecho un clavel,
sobre mi lecho el dolor.
Pero aunque siegue la flor
el filo de la Guadaña,
agazapado entre cañas
dormita su tallo, Amor.
Reposa mi Verso inerte...
Ya no tengo miedo a nada:
mi Pluma será la espada
que te velará a mi muerte.
Etiquetas:
De la Ternura y las Nueces,
Poemas
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2 comentarios:
Preciosa
Un abrazo
Preciosa
Un abrazo
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